lunes, 30 de diciembre de 2013

FELIZ AÑO!!


Aunque el invierno oficial no ha hecho más que comenzar, ya estamos casi en el corazón del invierno climatológico. A pesar de ello echo de menos a varios invernantes regulares en la zona. O no se les ve o se les ve en bajo número: pinzón real, esmerejón, zorzales reales y alirrojos, picogordo, lúganos... Ni siquiera están las reidoras por el río o la depuradora!


Estos días tan fríos, ¡qué buenos saben los rayos de sol!


En una vuelta que di por Leire pude ver bastante pinzón y entre ellos algunos reales pero no han bajado al llano. De hecho, en la primera visita del SACIN me salieron muchos menos pinzones que otras veces.

Lo que sí vi en Leire fueron al menos 7 acentores alpinos. Buena cifra para el lugar.




Los estorninos pintos, al igual que chovas piquirrojas sí han llegado en buen número


De escribanos la cosa tampoco es que ande sobrada. Se ven palustres, cerillos y montesinos pero también se me hacen escasos. Seré yo que este año ando más flojo?





En la depuradora no hay gaviotas y los patos no aguantan. En cambio hay bastante agachadiza y andarríos grande





También hay buenos número de bisbitas. Tanto pratenses...




...como alpinos



El otro día, aprovechando el ratico de sol, oí varios escribanos cantando, también algún mirlo.




Y entre lo que no es pluma, pues también se deja ver algo. Este mes de diciembre he podido ver algún murciélago, mariposas, y curiosamente dos ardillas muertas. Una en un pinar y otra atropellada.











Polygonia c-album. No es la única mariposa que he visto aprovechando las zonas abrigadas.



Con la nutria últimamente, casi empacho. 
He encontrado sus rastros en diminutas balsas, pero en ésta tuve la suerte de verla. No tiene ni la emoción ni la cercanía de verla en el río, pero en cambio te permite sentarte en la loma, clavar el telescopio y disfrutar de nutria hasta aburrir (o hasta que el reloj te recuerde que hay que volver...)






La nutria se ha recuperado de tal manera que en pequeñas balsas como ésta, e incluso más pequeñas, se pueden encontrar sus rastros. No creo que las cobije muchos días pero puedo asegurar que tampoco fue flor de un día.




Y como el calendario dice que vamos a cambiar de año pues aprovecho para felicitároslo. Los anteriores han venido un poco guerreros, repartiendo estopa a diestro y siniestro y a más de uno de nosotros nos han sacudido bien.
Que el 2014 nos reponga de las heridas recibidas!!


¡¡ FELIZ AÑO !!















lunes, 18 de noviembre de 2013

En racha...

En estas fechas no puedo salir al campo más que los fines de semana. Pero me están cundiendo, una de esas buenas rachas que hay que aprovechar. Tengo al bicherío de cara. Principalmente a los de pelo pero en los de pluma tampoco va mal la cosa. En este último mes por ejemplo he visto a tres gavilanes diferentes pillar presa, uno de ellos delante mis narices.

Creo que el inicio de la buena racha la marcó un topo, que no son nada faciles de ver. Lo tuve un rato a mis pies buscando alimento entre la hojarasca. Acabé tocándolo a ver si es que le pasaba algo, y salió escopetao...

A partir de entonces he tenido varios contactos con diferentes especies, especialmente con las nutrias. Una de las que más me gustó fue con una juguetona pareja. Nada más llegar al río y aún casi de noche, las oí. Gritaban en mi misma orilla y muy cerca, pero no aparecían y empecé a dudar si serían ellas. Acabaron por salir. Una pareja terriblemente juguetona y gritona que hicieron mis delicias. Al final una de ellas se acercó a la corriente y se dejó llevar. La otra se quedó donde yo estaba sin parar de gritar. Estiran la cabeza para sacar la garganta bien fuera de agua a la vez que chilla sin dejar de nadar.















Lo bueno es que he estando viendo nutrias este mes en tres lugares diferentes con bastantes contactos. El de las fotos es otro ejemplar que también lo he podido observar a placer. Aquí estaba alimentándose de cangrejos. Al estar en zona de corriente los llevaba a la piedra y ahí se los comía. Cuando los pilla en un remanso se los come sin salir del agua.














¡Cómo me gustan estos bichos!. No suelo sacarles fotos porque pocas veces hay buena luz, pero principalmente porque prefiero disfrutar el momento ya que muchas veces con el movimiento y ruido de sacar la foto la nutria te detecta y desaparece. Pero de vez en cuando inmortalizar el momento también es gratificante.

Aunque no me gusta mucho como quedan los vídeos pongo un par. Acabándose de comer un cangrejo (se trapiñó 3),  y después rascándose. La pena es que se vino derechita a donde yo estaba. Me llama la atención como nos detectan los animales con el olfato. Afortunademente para el resto de la fauna los humanos lo tenemos pésimo porque sería la leche detectarlos como ellos lo hacen y poder seguir sus rastros. Buuffff, de qué se libran!











Otro de los momentos intensos me lo proporcionó un jabalí. Oía un ruido en la orilla de enfrente pero como eran las 5 de la tarde pensé en algún perro. Aluciné cuando ví salir al jabal. Se metió en el río y lo cruzó. Salió a 15 metros de donde yo estaba. La emoción era considerable porque además sabía que el jabalí buscaría refugio yendo hacia donde yo estaba. Pero estos bichos tienen un olfato impresionante y nada más salir del agua me notó y al moverse nos vimos frente a frente. Adrenalina a tope. El jabalí reculó y curiosamente deshizo el camino volviendo a cruzar el río.El subidón de tener a 15 m un jabalinaco es considerable, no ha sido la primera vez y espero no sea la última. De echo este año he tenido tres contactos con jabalí pero como éste ninguno.








En época de caza los jabalís son desplazados de sus lugares y a la tarde intentan regresar. Es entonces cuando más probable es verlos en sitios sorprendentes. A este pobre una valla le impedía subir al pinar y andaba intentando SALTARLA dándose unos golpes considerables.


jueves, 19 de septiembre de 2013

Visones: paradigma del cambio

De vez en cuando conviene echar la vista atrás para ver con un poco de perspectiva cómo van cambiando las cosas. Aunque dado el ritmo al que se producen tampoco hace falta tomar mucha perspectiva...

Mi relación con el río ha sido siempre muy estrecha, pero el río de mi infancia poco se parece al de ahora. Centrándome en el tema animal, las tres especies que más interés me despiertan ahora, hace unos años (no tantos) ni se me pasaban por la cabeza. Nutria, castor y visón. Tres mamíferos con tres historias completamente diferentes.

La historia de la nutria es una historia de esperanza. La nutria fue abundante en nuestros ríos pero para cuando yo empecé a adentrarme en el mundo animal, ya había desaparecido. Pertenecía, en mi imaginario, a ese grupo de animales casi míticos que ansiabas poder ver "algún día", relegado a los rincones más puros y salvajes de nuestra geografía navarra. Sin embargo, ahora ha vuelto y lo ha hecho con buenas densidades, de tal manera que los que frecuentamos el río de vez en cuando podemos disfrutar con su visión. La he visto jugando, cazando, comiendo, copulando... Un placer inimaginable hace unos años.



Este verano vi mi primer visón americano. No, no os asustéis, no fue en mi zona de campeo. Lo detecté moviéndose por la vegetación. Asomó, me miró...



La segunda historia, la del castor, es una historia de (re)introducción peculiar. La cantidad de especies introducidas por el hombre es enorme. Y en todas el motivo suele ser o económico o de "divertimento". Pero en este caso fue por parte de "los amigos del castor". Con el argumento de que antes estuvo y el deseo de que vuelva. Lo cierto es que en Europa son varios los paises con programas oficiales de reintroducción de esta especie. Hoy en día lo veo en varios sitios pero ahí donde empieza a ser patente su presencia acaba siendo eliminado.




... estimó que yo no era ningún peligro y salió a pecho descubierto.



Y la tercera historia, la del visón, es para nuestra desgracia la más tristemente repetida. El visón europeo es una de las especies de mamíferos más amenazados del Viejo Continente. Hace unos años se descubrieron nuevas poblaciones en Navarra y surgió la esperanza. Parecía que iba colonizando nuevos hábitats y expandiéndose. Pero gracias a la mano del hombre (en este caso de la industria peletera) ya pulula hace tiempo por la Navarra atlántica el visón americano. Más grande, más adaptable, transmisor de enfermedades... desgraciadamente llamado a ser el sustituto de nuestro autóctono visón europeo.



Si hubiese sido el europeo estaría dando saltos de alegría. Pero evidentemente era el americano...

























En el río de mi infancia ni las truchas, ni los cangrejos, ni las avispas, ni un largo etcétera tenían apellido. No lo necesitaban.
Y es que la especie denominada a sí misma "sapiens" se está llevando al traste siglos de especialización y diferenciación de especies. Favoreciendo a las más adaptables y generalistas y expandiéndolas por todo el mundo. No en vano, algunos, desearía que los más alarmistas, consideran al hombre la causa de la séptima GRAN EXTINCIÓN.
Si fuese así habría una buena noticia: la vida se ha levantado seis veces antes. Y una mala: no sirve de consuelo


lunes, 26 de agosto de 2013

Tiempo de trasiego





El verano toca a su fin y ya hace días que en el campo se nota. Lo cierto es que desde mitades de julio se empezó a notar movimiento.





Los hirundínidos se ven en grandes grupos, con mucho joven. Pronto desaparecerán.

Una de las primeras especies en dasparecer son las cigüeñas que ya apenas se ven




Tuve la impresión de que no había sido un buen año para ellas en general, aunque la pareja frente a mi casa sacó tres pollos adelante



Por la depuradora ya se han visto cercetas, cucharas, andarríos chico, grande y bastardo, avefrías, gaviotas...


Gran cantidad de azulones, unos doscientos se concentran al atardecer


Este verano he disfrutado con una familia de mochuelos. Sobre todo con las clases de entrenamiento a la caza del hijo menor. Aún no volaba y ya saltaba sobre esos bolos negros de musgo del tejado. En un par de ocasiones su poca pericia en el salto sobre la "presa" le hizo darse la voltereta. Una vez "cazados" se los llevaba a la boca, pero eso no debía estar rico. Menos mal que de vez en cuando venía mamá con comida de verdad.
Al hermano mayor, ya volantón, le llamaba la atención mi presencia y se me acercaba a distancias increíbles. Ese día no llevaba la cámara, pero unos días más tarde volví a pasar por el lugar y ahí seguía toda la familia. Los adultos tomaron la distancia de seguridad pero no así los curiosos jóvenes. A pesar de no haber luz, le fui a tirar una foto testimonial a uno de ellos y nada más sacarla un acto reflejo me hizo echar la cabeza para atrás: el otro joven hizo ademán de posarse ¡¡¡en mi objetivo!!! Bendita inocencia!







 
También los abejarucos me hicieron disfrutar el otro día. Un grupo aceptó mi presencia (en coche) y no marcharon sino que siguiron cazando a mi alrededor. Estar envuelto en el griterío de estas aves es un placer. Ya no había luz y no pude sacarles fotos, pero tenerlos tan cerca fue un auténtico placer.



En La Mueda también se nota algo de movimiento aunque sólamente de paseriformes, ya que no se ve la lámina de agua. Desgraciadamente apenas se vió ni siquiera en primavera a pesar de haber sido un año muy húmedo...

El otro día mientras saboreaba la presencia de un cercanísimo rascón (tal vez el ave que más se te puede acercar aunque no la veas) algo pasó corriendo por mis pies. No era el rascón, ya que vi su color crema claro. Afortunadmente 3 metros más adelante salió y se puso de pie para saciar su curiosidad y satisfacer la mía. Era una comadreja. Hacia tiempo que no veía una.


Al menos una pareja de laguneros sacó a su prole adelante.




Hacia el 20 de julio vi los primeros carricerines






Y casi un me más tarde, el 15 de agosto, detecté los primeros pechiazules








Estos días el campo se ha llenado de cerrojillos, mosquiteros musicales, tarabillas norteñas...
Así que toca despedir a unos (nunca sabes si el ejemplar que acabas de ver será el último de la temporada) y estar atento a los que pasan...






He visto bastantes oropéndolas este verano. Me llamó la atención ver a un ejemplar zambullirse en mitad del río. Sumergió más de medio cuerpo, probablemente a la caza de algún insecto ¿?


No sólo toca decir adios a las aves, también a las mágnificas noches de verano...

jueves, 20 de junio de 2013

Primavera en la depuradora


Finaliza una de las primaveras más atípicas que hemos conocido, al menos aquí, en Navarra, con temperaturas muy bajas y mucha agua. Esto ha permitido ver muchas especies de paso, pero está siendo malo para las nidificantes.






Ciertamente han sido numerosas las especies que han hecho escala en la depuradora. Destacar las agujas colipintas, correlimos gordo, los chorlitejos grandes por la gran cantidad de ellos que ha habido, los chorlitos grises o los correlimos tridáctilos, que también fueron numerosos (hasta 20 ejemplares juntos conté un día)



Los andarrios bastardos han estado mucho tiempo presentes. Creo que el máximo que vi juntos fueron 6 ejemplares.




También han recalado garceta común y bueyera, fumarel común, correlimos común, archibebes común y claro, combatiente...



Una de las estrellas han sido los correlimos gordos, que aparecieron ya vistiendo su plumaje de gala. Todo un lujo





Archibe claro. Hubo algunos, pero no destacaron con respectos a otros años




Los chorlitejos grandes fueron ciertamente numerosos y estuvieron mucho tiempo. Al final empezaron a aparecer comportamiento de celo y hubo bastantes trifulcas



En esas trifulcas a veces salía perdiendo su hermano pequeño, el chorlitejo chico, asentado en el lugar y más dedicado a la tarea de la reproducción


Merece la pena destacar las lavanderas boyeras. No es que haya habido un número espectacular pero sí muy variado. Además de las habituales iberiae y flava estuvieron bien representadas las flavissimas (no menos de 8); la thunbergii (al menos 4); y el sorpresón de la superciliaris.



El año que más thunbergii he visto, mínimo 4, pero probablemente 6




La rareza del paso: la superciliaris, a la que ya le dediqué una entrada anterior


Respecto a las reproductoras, este año no han criado ni la polla de agua, ni la focha. Los azulones han estado poco sincronizados y ha habido polladas nuevas durante mes y medio.



Esto sumado a que la presencia de patiamarillas es cada vez mayor pues daba origen a momentos de tensión. La pacífica convivencia con las gaviotas desaparece cuando hay pollos de por medio. Lo cierto es que en cuanto una patiamarilla está en vuelo de "a ver qué hay para comer..." la tensión es palpable e incluso los machos de azulón suelen levantar el vuelo a su paso.





En esta ocasión una gaviota lanza el ataque y los pollos alrededor de la madre se sumerjen ante la cercanía de la gaviota.




Enseguida la otra patiamarilla se une al ataque. Parece que en defensa de la prole viene papá, pero enseguida recula y deja a la familia sola ante el peligro





No así la madre que encara cada acoso de las gaviotas. 
Los atemorizados pollitos se sumergían ante cada pasada. En la última foto se puede apreciar (por las salpicaduras) como la gaviota había conseguido dispersarlos, pero finalmente su ataque no tuvo recompensa.