La Sierra de Leire marca claramente la frontera entre la Navarra prepirenáica y la zona media. En esta época se pueden ver especies tan interesantes como el pito negro, quebrantahuesos, verderón serrano, piquituerto, carbonero palustre, acentor alpino, camachuelo…
Para mí es un sitio emblemático, lugar recurrente para un paseo en cualquier época del año.
Este sábado, ya antes de dejar el coche me topé con una familia de corzos. Bastante confiados hasta que otro vehículo, menos discreto, los asustó.
Joven corzo que se acercó a curiosear |
No tardó en alejarse buscando el cobijo del grupo capitaneado por este precioso macho, con la nueva cornamente aún cubierta de "terciopelo" |
En esta sierra hay una importante población de cabras. Probablemente provengan de ejemplares que años atrás se dejarían pastando, pero que hace tiempo alcanzaron la condición de “salvajes”. Se mueven por la zona de roble, haya y pedregales. No tengo ni idea de especies o subespecies de estos bichos, ni sé que repercusión tienen en el medio. Sólo que ahí están, formando parte de su ecosistema.
Ejemplar de cabra "asilvestrada" y de bonita cornamenta. |
Los páridos tienen aquí una representación de todas sus especies. El carbonero garrapinos estaba bastante activo, no así el palustre que sólo vi un ejemplar.
Carbonero garrapinos |
Carbonero palustre |
De lo que siempre puedes disfrutar aquí, es de las rapaces. Están casi todas. Obviamente los más habituales son los buitres.
Buitre leonado |
El halcón peregrino tiene varias parejas en sus cortados. Este ejemplar inicialmente me pareció que llevaba una presa, pero luego vi que le colgaba la pata. No sé si por algún problema o simplemente la llevaba “relajada”.
En esta foto apenas se aprecia, pero este halcón volaba con una pata colgando. De ellas depende su sustento. Espero que no fuese por una lesión |
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